¿Todavía no sabes cómo superar la vuelta a la rutina tras unos días de descanso? En LOCK & enjoy! queremos ayudarte a volver de las vacaciones. Es probable que, después de haber estado en la playa, te cueste ponerte a trabajar. No te asustes, lo que te pasa es algo natural llamado síndrome postvacacional y existen diferentes maneras de superarlo. Así, no te costará tanto rendir al máximo.
¿Qué es el síndrome postvacacional?
El síndrome postvacacional es un fenómeno psicológico y emocional que puedes experimentar al regresar a la rutina después de las vacaciones. Es un problema caracterizado por una sensación de malestar, agotamiento y estrés que se manifiesta a través de varios síntomas. Algunos ejemplos son el cansancio excesivo, la irritabilidad, la dificultad para concentrarse o la falta de motivación.
¿Cómo se origina el síndrome? Surge, entre otras causas, debido a la transición abrupta de un período de descanso y relajación a otro plagado de demandas y responsabilidades cotidianas. Durante las vacaciones, te separas del estrés y de las preocupaciones habituales, lo que causa una dificultad al reencontrarte con él. Al regresar, te ves avocado a adaptarte a los horarios, a la carga de trabajo y a tus obligaciones. Si esto se lleva a cabo en poco tiempo, puedes acabar superado y desarrollarás una fuerte sensación de malestar.
Descubre cómo superar la vuelta a la rutina
Por suerte, el síndrome postvacacional puede sobrellevarse sin sufrir sus peores consecuencias, como una bajada significativa de tu productividad. No va a ser tan sencillo como encontrar una consigna de equipaje en la que guardar las maletas, pero por algo hay que empezar. Al fin y al cabo, merece la pena reincorporarse al trabajo con una buena actitud. Para que no sea muy cuesta arriba, desde LOCK & enjoy! te echamos una mano con los siguientes consejos.
Planifica
El principal reto de volver a la rutina es evitar que resulte abrumador. No conviene pasar de cero actividad al 100 % de tu capacidad de trabajo en tan solo uno o dos días. Una forma de conseguirlo es organizando la vuelta al trabajo de forma progresiva. Empieza por retomar tus tareas unos días antes y presta atención a las que te resulten sencillas para no rechazar enfrentarte a las complicadas.
El objetivo de la planificación es conseguir una transición suave y progresiva. De este modo, te irás acostumbrando con el paso de los días y no sentirás un gran estrés. Cuando vuelvas a tu puesto, estarás listo para afrontar los nuevos retos en las mejores condiciones, algo en lo que te apoyamos desde LOCK & enjoy!.
Mantén una rutina
La incorporación al trabajo implica recuperar la rutina que habías dejado atrás. Debes levantarte a una hora determinada, por ejemplo, algo que llevas sin hacer varias semanas. El choque al volver puede resultar desalentador, ya que no vas a querer madrugar de buenas a primeras. Para esquivar este inconveniente, mantén unos horarios similares, si es posible, durante las vacaciones.
No importa que duermas una o dos horas más, pero es importante no caer en el caos absoluto. Por ejemplo, levantándote después del medio día o por la tarde. La idea es que no cambies tus hábitos al despertar de manera radical. Y lo mismo puedes aplicar al irte a la cama, puesto que tendrás un problema idéntico al anterior. Si llevas varias semanas acostándote de madrugada, procura no volver a la normalidad en un solo día.
Organiza las prioridades
Cuando vuelvas, cabe la posibilidad de que te estén esperando una gran variedad de tareas pendientes o nuevas. Solucionarlas todas va a requerir de tiempo, esfuerzo y de organización. Haz una lista con lo que tienes que hacer y establece qué es prioritario. Con sencillez, recuperarás la forma perdida sin estresarte y habiendo establecido una escala basada en la prioridad de cada actividad.
Espacia el descanso
Sí, el descanso tras volver de las vacaciones es tan importante como escoger una buena consigna inteligente. Con una ganas en seguridad y con lo otro previenes acumular un gran cansancio. Procura reservar un momento del día para tomarte un respiro y desconectar. Es la situación idónea para dar un paseo, llevar a cabo una actividad al aire libre o simplemente dejar la mente en blanco.
La clave de esta recomendación es que se orienta a mantener el estrés bajo control, el cual puede acumularse rápidamente. Al encontrar un instante de relajación, serás capaz de afrontar las primeras semanas de trabajo con soltura. Por ejemplo, si paras cinco minutos cada hora, como indican en la técnica de concentración pomodoro, podrás realizar un pequeño descanso.
En LOCK & enjoy! no solo te ofrecemos las mejores consignas, también te ayudamos a volver al trabajo. Dejar atrás las vacaciones es algo difícil, pero no imposible. Solo hay que tomárselo con calma y reincorporarse poco a poco. Recuerda, se trata de evitar que el hecho de volver a tus responsabilidades te resulte inabarcable.